Las encías inflamadas es uno de los problemas más frecuentes entre nuestros pacientes. De hecho, una de las preguntas más repetidas en consulta son las siguientes: “¿Es normal que se me hinchen las encías?” o “¿Qué puedo hacer para que dejen de inflamarse?”.
Hoy daremos respuestas a estas y otras preguntas. Conocerás las razones por las que se inflaman y qué hay que hacer para prevenir y curar esta afección.
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¿Por qué tengo las encías inflamadas?
Las encías cumplen una misión fundamental en tu boca: sostener los dientes y protegerlos frente a bacterias, restos de comida o cualquier agresión externa.
Cuando se inflaman, lo hacen como respuesta a una irritación o infección. A veces es algo puntual, pero otras puede ser el primer aviso de que algo no va bien.
Principales causas:
Acumulación de placa bacteriana
Es la causa más frecuente. Si no se elimina bien con el cepillado, la placa se endurece y se convierte en sarro, irritando la encía y provocando inflamación.
Cepillado demasiado agresivo o uso de un cepillo inadecuado
Presionar demasiado o usar un cepillo de cerdas duras. Un exceso de fuerza al limpiar los dientes también puede inflamar las encías.
Cambios hormonales
El embarazo, la menstruación o incluso la pubertad pueden hacer que las encías estén más sensibles y se inflamen con más facilidad.
Tabaquismo
Fumar reduce el flujo sanguíneo de las encías y debilita sus defensas. Además, enmascara síntomas como el sangrado, lo que retrasa el diagnóstico de problemas como la gingivitis.
Enfermedades como la diabetes o el estrés prolongado
Ambas condiciones pueden alterar tu sistema inmunológico, lo que hace que las encías estén más expuestas a infecciones e inflamación.
Deficiencia de vitamina C
Una alimentación pobre en nutrientes esenciales también puede afectar directamente a la salud de las encías.
A veces vienen pacientes con las encías inflamadas pensando que es algo sin importancia, pero suele ser el primer aviso de que algo no va bien. – Dra. Berta Monfort León, especialista en periodoncia en COI Clínica Dental.
¿Cuándo las encías inflamadas alertan de gingivitis?
No siempre que tienes las encías inflamadas significa que hay un problema serio. A veces se debe a una pequeña irritación puntual.
No obstante, cuando la inflamación no mejora o aparece acompañada de otros síntomas, podría tratarse del inicio de una gingivitis.
Estas son algunas señales que deberían ponerte en alerta:
1. Sangrado frecuente al cepillarte o usar hilo dental
Si ocurre con frecuencia, es probable que la inflamación se deba a una acumulación de placa bacteriana bajo la encía.
2. Enrojecimiento o inflamación persistente
Cuando las encías están rojas, brillantes o más hinchadas de lo habitual durante varios días, es una señal de que algo no va bien.
3. Mal aliento constante, aunque te cepilles bien
El mal aliento crónico puede deberse a bacterias acumuladas que inflaman las encías desde dentro.
4. Sensibilidad o molestias al masticar o tocar la zona
Aunque no haya dolor agudo, sí puede notarse incomodidad o sensibilidad al presionar las encías inflamadas.
5. Cambio en la forma de la encía o retracción visible
Si la encía parece “bajarse” o deja más parte del diente a la vista, o notas que algún diente se mueve, es hora de visitar al dentista.
Si te identificas con varios de estos síntomas, no lo dejes pasar. Cuanto antes se diagnostique la causa, más fácil será tratarla. En nuestra clínica dental te ayudamos a mantener unas encías sanas y prevenir problemas mayores.
Es más, según el Consejo General de Dentistas (19 de marzo de 2025), en España cerca del 35 % de los adultos mayores sufre periodontitis y alrededor del 25,5 % de los adultos jóvenes padece también esta enfermedad; además, más del 65 % de la población presenta gingivitis o inflamación gingival
Tratamiento para las encías inflamadas
La buena noticia es que en la mayoría de los casos, las encías inflamadas se pueden curar y se sigue el tratamiento adecuado.
Eso sí, lo primero es acudir al dentista para identificar la causa exacta. Porque no es lo mismo una inflamación puntual que una gingivitis en fase inicial o un problema más avanzado.
Mejorar la higiene bucodental en casa
Cuando la inflamación es leve y puntual, lo primero es revisar tu rutina de higiene. Cepíllate con suavidad después de cada comida, usa hilo dental o cepillos interproximales y un colutorio, si tu dentista lo aconseja.
A veces, una mejora en los hábitos ya consigue reducir la inflamación. Eso sí, si el problema persiste, no basta con limpiarse mejor, hay que acudir a revisión.
Control preventivo y limpieza profesional
Aunque tengas buena higiene, hay zonas que el cepillo no alcanza, sobre todo debajo de las encías. Ahí es donde se acumula el sarro que provoca inflamación.
Con una limpieza dental profesional o profilaxis, el odontólogo elimina por completo la placa y el cálculo acumulado, incluso en zonas profundas.
Este tratamiento es rápido, indoloro y muy eficaz para prevenir que una simple inflamación evolucione a gingivitis o periodontitis.
Tratamiento antibacteriano con clorhexidina
Si la encía está inflamada por infección bacteriana leve, es posible que el dentista te recomiende un enjuague o gel de clorhexidina durante unos días. Esta sustancia ayuda a reducir la carga bacteriana y a calmar la inflamación.
No debe usarse por largos periodos sin control profesional, ya que puede manchar los dientes o alterar la flora bucal. Siempre sigue las pautas que te indique el especialista.
Raspado y alisado radicular (curetaje)
Cuando hay gingivitis más avanzada o ya ha empezado una periodontitis, la inflamación se encuentra por debajo de la encía, dentro de las bolsas periodontales.
En ese caso, se realiza un raspado y alisado radicular. Es un tratamiento en profundidad que elimina el sarro y las bacterias que se han alojado bajo la encía y que impiden su curación.
A menudo se realiza con anestesia local y en varias sesiones, según la gravedad del caso.
Cirugía periodontal
Si la inflamación no se ha tratado a tiempo y ha dañado el tejido que sujeta al diente, puede ser necesaria una intervención quirúrgica.
Dependiendo del diagnóstico, se opta por:
Cirugía de acceso periodontal o resectiva
Se levanta la encía para limpiar el interior, eliminar tejido dañado y volver a fijarla bien.
Cirugía regenerativa
Permite recuperar el hueso y los tejidos perdidos mediante injertos óseos o de materiales bioactivos.
Cirugía mucogingival
Usada en casos extremos para corregir defectos estéticos o funcionales graves en las encías.
Estas intervenciones se reservan solo para casos severos. Y lo mejor es que, con revisiones y cuidado, puedes evitarlas.
Conclusión
Las encías inflamadas no deben pasarse por alto. Aunque a veces solo se trata de una irritación puntual, en otros casos pueden ser el primer aviso de un problema mayor como la gingivitis o incluso una periodontitis.
Por eso, si notas que tus encías están rojas, hinchadas, te sangran al cepillarte o tienes mal aliento constante, lo mejor es acudir cuanto antes a tu dentista.
Con una revisión a tiempo y el tratamiento adecuado, es posible frenar la inflamación, curarla por completo y evitar complicaciones más serias.
¿Tienes encías inflamadas?
Si sientes molestias, inflamación o sangrado frecuente en las encías, no esperes a que vaya a más.
La Dra. Berta Monfort León, especialista en periodoncia y parte del equipo médico de COI Clínica Dental en Granollers, puede ayudarte a diagnosticar el problema y tratarlo con precisión, cercanía y la tecnología más avanzada.